Conocidos como mecanismos de detección o prevención de intrusiones, los IDS/IPS se han convertido en un "must" en el SIMO de dispositivos que han de tener las organizaciones como mecanismos de seguridad en su infraestructura.
Dependerá del uso que se les vaya dando a estos dispositivos, que se conviertan en herramientas útiles que aporten valor en el proceso de la seguridad de las organizaciones, o se conviertan en unos "cacharros" más, cuyo mantenimiento engrose la lista de tareas de los administradores. Ya que todos los dispositivos que forman parte del stuff de una compañía requieren un mantenimiento (backups, actualizaciones, parches, licencias,...) por lo menos vamos a dar las pautas para que la utilización de sondas de detección/prevención de intrusiones puedan resultar útiles en su funcionalidad.
Antes que nada, quiero dejar claro que las sondas IDS son dispositivos que se posicionan offline del flujo de las redes, de manera que reciben una copia del tráfico de cada VLAN (mediante la utilización de TAPs físicos o con la creación de un port mirroring o port span de una VLAN de un switch capaz de hacerlo). Por un interfaz sin pila TCP/IP reciben el tráfico en formato RAW y lo analizan enfrentándolo contra una base de datos de firmas de ataques conocidos, de manera que, a través de otro interfaz, cuando detectan tráfico malicioso, envían señales de alarmas a una base de datos centralizada. Estos dispositivos solamente son capaces de detectar tráfico y, en ciertas ocasiones, pueden llevar a cabo reacciones activas que eviten males mayores en la infraestructura de producción. En este caso nos referimos a IDS de red, puesto que existen (o existieron hace unos cuantos años) los llamados IDS de host. Estos eran agentes software que se instalaban de forma directa en cada uno de los servidores a monitorizar y que enviaban alertas sobre ataques contra los mismos.
Los IPS sin embargo, funcionan de una forma diferente, puesto que se emplazan en modo inline entre las diferentes redes, de modo que el tráfico que pasa hacia y desde una red los ha de atravesar, pudiendo discriminar si el tráfico es malicioso o no. Al encontrarse en modo transparente e inline, este tipo de dispositivo sí que es capaz de bloquear todo tipo de tráfico que se considere un ataque. En líneas generales (aunque los IPS han evolucionado mucho), el funcionamiento principal de los IPS a la hora de identificar ataques es idéntico al de los IDS. Se basan en firmas de ataques conocidos y envían por un tercer interfaz las alertas a una base de datos centralizada.
Como diferencias principales entre ambos, aparte de las ya comentadas referidas a la capacidad de detectar únicamente o de bloquear los ataques, es la cantidad de tráfico a monitorizar por parte de ambos. En el caso de los IPS, sólo son capaces de identificar ataques dentro del tráfico que los atraviesa en ambos sentidos. Sin embargo, los IDS de red van más allá, puesto que al analizar el tráfico de una VLAN completa, es capaz de clasificar ataques entre máquinas de la VLAN, no sólo la que pasa de una red a otra.
Inicialmente, todo despliegue de una plataforma de sondas IDS/IPS, cómo si del apostamiento de francotiradores se hablase, requiere planificar con cierta inteligencia.
Como tónica habitual en la gestión de proyectos de este tipo lo que manda principalmente es el presupuesto asignado para invertir en el análisis de la seguridad de las redes.
Suponiendo que disponemos de algo de presupuesto para equipos con licencias comerciales, mi recomendación sería diversificar entre software comercial y software libre. Si bien como iniciativas libres disponemos del ultraconocido Snort (que puede funcionar como IDS y como IPS inline). Como soluciones comerciales más recomendables podemos contar con ISS (adquirida por IBM), Tipping Point (adquirida por 3Com), McAfee Intrushield (solución IPS basada en ASIC), Sourcefire (spin-off comercial de Snort que se integra sobre máquinas Nokia, aparte de sus propios appliances),...
No obstante, y dependiendo en mayor medida de si se tiene proyectado efectuar cambios en la estructura de cortafuegos de red principales, existen los llamados UTMs (Unified Threat Management) o MFA (Multi Functional Appliances) que son en realidad cajas que aunan las funcionalidades de cortafuegos de red, gestor de túneles VPN, antivirus, proxy, gestor de contenidos e IDS/IPS (dependiendo si solo registran las alarmas detectadas o si bloquean los ataques), entre otros... por lo que no es nada desechable la idea de implantar como pilar central de la seguridad un dispositivo de estas características que sea capaz de detectar y bloquear los ataques que lo atraviesen en dirección desde/hasta cualquiera de las redes que delimitan. Por poner ejemplos de fabricantes de dispositivos comerciales UTM, podríamos indicar: Fortinet, Juniper, NetASQ, Checkpoint, Radware,... De esta manera es posible evitar la inclusión de dispositivos IPS puros en los segmentos más importantes de la red. Huelga decir que si tenemos presupuesto ilimitado para llevarlo a cabo, lo más recomendable es situar elementos de diferentes fabricantes por lo que utilizar uno o varios UTM con la función de IPS activa para separar diferentes redes, y además la inclusión de IPS puros en los segmentos de red que necesitemos.
Supongamos que no contaremos con un dispositivo de estas características como eje central distribuidor de las redes principales de nuestra organización. Lo más normal en estos casos es dimensionar la cantidad de sondas a desplegar en caso de los IDS. Si contamos con instalar Snort como IDS (opción recomendada por ser gratuito y de gran calidad), de manera que podemos darnos el lujo de tener una sonda por cada red que posea la organización. En caso de tener limitación en el número de sondas por el coste del hardware, habremos de priorizar sobre las redes en las que tengamos elementos más críticos para nuestro negocio. Se suelen seguir criterios como "la red con más servicios expuestos a Internet" o "la red donde más información confidencial haya".
En cuanto al despliegue de IPS, supongamos que hemos destinado el grueso del presupuesto del proyecto a comprar equipos comerciales IPS. Lo más recomendable es situar un dispositivo (o clústers en alta disponibilidad si el presupuesto lo permite) justo en el punto de acceso a la red (puede ser en la salida/entrada de cada interfaz del firewall que delimita esa red).
Con esta disposición lograremos tener monitorizado el tráfico que entra a cada una de las redes que separa el firewall principal (y bloquearlo con los UTM o los IPS) y el tráfico que se intercambian las máquinas de cada red entre ellas (mediante el análisis del tráfico interno entre máquinas de un mismo segmento), pudiendo detectar actividad vírica que pudiera dejar fuera de combate una VLAN completa.
En posteriores entregas intentaré detallar lo mejor posible cómo configurar los diferentes elementos de seguridad que hemos incluido en nuestra arquitectura de red.
Dependerá del uso que se les vaya dando a estos dispositivos, que se conviertan en herramientas útiles que aporten valor en el proceso de la seguridad de las organizaciones, o se conviertan en unos "cacharros" más, cuyo mantenimiento engrose la lista de tareas de los administradores. Ya que todos los dispositivos que forman parte del stuff de una compañía requieren un mantenimiento (backups, actualizaciones, parches, licencias,...) por lo menos vamos a dar las pautas para que la utilización de sondas de detección/prevención de intrusiones puedan resultar útiles en su funcionalidad.
Antes que nada, quiero dejar claro que las sondas IDS son dispositivos que se posicionan offline del flujo de las redes, de manera que reciben una copia del tráfico de cada VLAN (mediante la utilización de TAPs físicos o con la creación de un port mirroring o port span de una VLAN de un switch capaz de hacerlo). Por un interfaz sin pila TCP/IP reciben el tráfico en formato RAW y lo analizan enfrentándolo contra una base de datos de firmas de ataques conocidos, de manera que, a través de otro interfaz, cuando detectan tráfico malicioso, envían señales de alarmas a una base de datos centralizada. Estos dispositivos solamente son capaces de detectar tráfico y, en ciertas ocasiones, pueden llevar a cabo reacciones activas que eviten males mayores en la infraestructura de producción. En este caso nos referimos a IDS de red, puesto que existen (o existieron hace unos cuantos años) los llamados IDS de host. Estos eran agentes software que se instalaban de forma directa en cada uno de los servidores a monitorizar y que enviaban alertas sobre ataques contra los mismos.
Los IPS sin embargo, funcionan de una forma diferente, puesto que se emplazan en modo inline entre las diferentes redes, de modo que el tráfico que pasa hacia y desde una red los ha de atravesar, pudiendo discriminar si el tráfico es malicioso o no. Al encontrarse en modo transparente e inline, este tipo de dispositivo sí que es capaz de bloquear todo tipo de tráfico que se considere un ataque. En líneas generales (aunque los IPS han evolucionado mucho), el funcionamiento principal de los IPS a la hora de identificar ataques es idéntico al de los IDS. Se basan en firmas de ataques conocidos y envían por un tercer interfaz las alertas a una base de datos centralizada.
Como diferencias principales entre ambos, aparte de las ya comentadas referidas a la capacidad de detectar únicamente o de bloquear los ataques, es la cantidad de tráfico a monitorizar por parte de ambos. En el caso de los IPS, sólo son capaces de identificar ataques dentro del tráfico que los atraviesa en ambos sentidos. Sin embargo, los IDS de red van más allá, puesto que al analizar el tráfico de una VLAN completa, es capaz de clasificar ataques entre máquinas de la VLAN, no sólo la que pasa de una red a otra.
Inicialmente, todo despliegue de una plataforma de sondas IDS/IPS, cómo si del apostamiento de francotiradores se hablase, requiere planificar con cierta inteligencia.
Como tónica habitual en la gestión de proyectos de este tipo lo que manda principalmente es el presupuesto asignado para invertir en el análisis de la seguridad de las redes.
Suponiendo que disponemos de algo de presupuesto para equipos con licencias comerciales, mi recomendación sería diversificar entre software comercial y software libre. Si bien como iniciativas libres disponemos del ultraconocido Snort (que puede funcionar como IDS y como IPS inline). Como soluciones comerciales más recomendables podemos contar con ISS (adquirida por IBM), Tipping Point (adquirida por 3Com), McAfee Intrushield (solución IPS basada en ASIC), Sourcefire (spin-off comercial de Snort que se integra sobre máquinas Nokia, aparte de sus propios appliances),...
No obstante, y dependiendo en mayor medida de si se tiene proyectado efectuar cambios en la estructura de cortafuegos de red principales, existen los llamados UTMs (Unified Threat Management) o MFA (Multi Functional Appliances) que son en realidad cajas que aunan las funcionalidades de cortafuegos de red, gestor de túneles VPN, antivirus, proxy, gestor de contenidos e IDS/IPS (dependiendo si solo registran las alarmas detectadas o si bloquean los ataques), entre otros... por lo que no es nada desechable la idea de implantar como pilar central de la seguridad un dispositivo de estas características que sea capaz de detectar y bloquear los ataques que lo atraviesen en dirección desde/hasta cualquiera de las redes que delimitan. Por poner ejemplos de fabricantes de dispositivos comerciales UTM, podríamos indicar: Fortinet, Juniper, NetASQ, Checkpoint, Radware,... De esta manera es posible evitar la inclusión de dispositivos IPS puros en los segmentos más importantes de la red. Huelga decir que si tenemos presupuesto ilimitado para llevarlo a cabo, lo más recomendable es situar elementos de diferentes fabricantes por lo que utilizar uno o varios UTM con la función de IPS activa para separar diferentes redes, y además la inclusión de IPS puros en los segmentos de red que necesitemos.
Supongamos que no contaremos con un dispositivo de estas características como eje central distribuidor de las redes principales de nuestra organización. Lo más normal en estos casos es dimensionar la cantidad de sondas a desplegar en caso de los IDS. Si contamos con instalar Snort como IDS (opción recomendada por ser gratuito y de gran calidad), de manera que podemos darnos el lujo de tener una sonda por cada red que posea la organización. En caso de tener limitación en el número de sondas por el coste del hardware, habremos de priorizar sobre las redes en las que tengamos elementos más críticos para nuestro negocio. Se suelen seguir criterios como "la red con más servicios expuestos a Internet" o "la red donde más información confidencial haya".
En cuanto al despliegue de IPS, supongamos que hemos destinado el grueso del presupuesto del proyecto a comprar equipos comerciales IPS. Lo más recomendable es situar un dispositivo (o clústers en alta disponibilidad si el presupuesto lo permite) justo en el punto de acceso a la red (puede ser en la salida/entrada de cada interfaz del firewall que delimita esa red).
Con esta disposición lograremos tener monitorizado el tráfico que entra a cada una de las redes que separa el firewall principal (y bloquearlo con los UTM o los IPS) y el tráfico que se intercambian las máquinas de cada red entre ellas (mediante el análisis del tráfico interno entre máquinas de un mismo segmento), pudiendo detectar actividad vírica que pudiera dejar fuera de combate una VLAN completa.
En posteriores entregas intentaré detallar lo mejor posible cómo configurar los diferentes elementos de seguridad que hemos incluido en nuestra arquitectura de red.
0 comments :
Publicar un comentario